Glew, palabra chiquita

Glew, palabra chiquita pero de significado

muy grande para mí. Esta es una excelente

oportunidad que se me presenta para poder

expresar mi agradecimiento a esta ciudad

que me recibió y me brindó la ocasión de

desempeñarme en una de sus instituciones.

Desde hace casi diez años atiendo la

Biblioteca Popular Pablo Rojas Paz, una de

las organizaciones más reconocidas dentro

de la ciudad.

Al principio guiándome por la lógica y el

sentido común; y después haciendo, quizás

más metódica la gestión. Pero siempre con

el mismo espíritu y las ganas de contribuir,

en la medida de mis posibilidades, al

desarrollo y engrandecimiento de esos jóvenes

que a diario frecuentan nuestra biblioteca.

Jóvenes y adolescentes que quieren prepararse

para un futuro que esperan, como esperamos

todos, sea mejor, más pleno, más justo.

Jóvenes y adolescentes para quienes los adultos,

quizás no les presentamos el paradigma ideal y

hoy lo lamentamos. Pero entiendo que no es tarde

para remediarlo, por eso es que desde la

biblioteca tratamos de aportar nuestro granito

de arena y ayudar a que esa situación se

revierta.

A ellos que se brindan su cariño y su gratitud

me brindo como amiga, como bibliotecaria,

como una ciudadana más de esta ciudad de

nombre chiquito, Glew.

Magela Zanoniani

Bibliotecaria